Buscar este blog

sábado, 20 de marzo de 2010

EUROESCÉPTICO

Esperemos que no llegue ese día que al despertar escuchemos a los pregoneros de cada mañana anunciándonos que el euro ha dejado de ser nuestra moneda y volvemos a ¿la peseta? porque nuestros vecinos nos han echado del grupo por embusteros e incumplidores con nuestros deberes.

Esperemos, digo, que no tengamos que desayunarnos nunca con esa noticia, aunque si uno pone atención notará que cada vez son más las voces que temen que ese día llegue, por lo que no dejan de advertirnos de la catástrofe que nos puede caer encima.

Pero nosotros, con la alegría que nos envuelve, seguimos despilfarrando como hijos de casa bien y mirando a esos mal agüeros como gente que no sabe disfrutar de la vida.

Creo que con razón en Europa han dicho basta, y se han puesto manos a la obra para encontrar los medios legales y expulsar de la sociedad a los informales, signos que dan a entender que se han cansado de ser los paganos de tanta indolencia.

Y con nuestro orgullo por delante, (insensatez dice mi amigo), muy español por cierto, no toleramos que alguien nos llame al orden, así que contra todas las advertencias, nosotros seguimos de fiesta en fiesta.

¿Y después?

¿Después? Que me quiten lo bailao.

Así nos irá.

No hay comentarios:

Publicar un comentario